El verano climatológico de 2019, período comprendido entre el 1 de junio y el 31 de agosto del presente año, ha tenido un carácter térmico "frío" o "muy frío" en buena parte del litoral atlántico, la Janda y la mitad occidental de las campiñas de Jerez y de Arcos de la Frontera. En el resto ha sido un trimestre veraniego con una temperatura media dentro del rango normal (período de referencia 1981-2010). En cuanto a las precipitaciones, los acumulados han sido inferiores a los valores normales en toda la provincia.
Temperatura del aire
El trimestre veraniego ha sido predominantemente frío o muy frío en las comarcas con más influencia atlántica y normal en el resto. Nada que ver con la situación que se ha vivido en amplias zonas de la Península Ibérica y de Centroeuropa, donde el verano ha sido muy cálido y se han sufrido algunos episodios de calor muy intensos. En la Figura 1 se puede distinguir claramente una zona de anomalías térmicas negativas en la baja troposfera al oeste y suroeste de la Península, que contrasta con las temperaturas anormalmente elevadas de las regiones mediterráneas y de Europa Central durante los meses de junio y julio. En general, el entorno del golfo de Cádiz estuvo bajo la influencia de masas de aire templado, con vientos de poniente en superficie. La dorsal africana y los ascensos de aire cálido hacia latitudes más altas afectaron más a las zonas mediterráneas. En agosto, los episodios de levante fueron más frecuentes y resultó un mes mucho más cálido en toda la provincia.
El verano climatológico ha tenido un carácter muy frío en el observatorio de Cádiz. La temperatura media ha quedado 0,7 ºC por debajo del valor normal. La media de las temperaturas máximas (26,1 ºC) ha resultado inferior al valor normal en 0,8 ºC y la media de las mínimas (20,5 ºC) ha quedado 0,4 ºC por debajo de la normal. Por lo tanto, la oscilación térmica o amplitud térmica diaria (5,6 ºC) ha sido 0,4 ºC inferior a la normal en este punto de la provincia. Junio y julio fueron muy fríos, con una anomalía térmica de -0,9 ºC y -1,0 ºC, respectivamente. Agosto tuvo un carácter térmico normal, con una temperatura media que quedó 0,2 ºC por debajo del promedio climático mensual.
En la Figura 2 se pueden distinguir pocos episodios cálidos y todos ellos de muy corta duración. Las temperaturas máximas quedaron claramente por debajo del promedio climático durante buena parte de los meses de junio y julio, mientras que las mínimas estuvieron algo más próximas a los valores normales. El episodio cálido más intenso tuvo lugar en torno al 22 de julio, aunque en ningún caso se alcanzó la temperatura umbral de ola de calor (percentil del 95 % de la serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo 1971-2000, según AEMET). La mínima absoluta del verano se registró el día 15 de junio, en la semana más fresca de la estación en muchos puntos de la provincia. En total se han contabilizado 61 noches tropicales (días con temperatura mínima igual o superior a 20 ºC), una menos que el verano pasado. Este valor queda ligeramente por debajo de la media del período de referencia (64 noches tropicales) y es claramente inferior a las 85 noches tropicales anotadas durante el verano de 2017.
El episodio cálido más destacado del verano por su intensidad y duración se produjo entre los días 12 y 18 de agosto. El único día con una temperatura máxima igual o superior a los 40 ºC fue el 17 de este mes (40,2 ºC), una jornada que también fue muy calurosa en otros puntos de la campiña. Por ejemplo, en San José del Valle, donde se registró una máxima de 40,1 ºC. Las temperaturas más bajas del trimestre se registraron en torno al día 15 de junio. Llama la atención la mínima absoluta estacional del aeropuerto de Jerez, que fue bastante baja. La última vez que la mínima veraniega bajó de 10 ºC fue en 1992 (9,8 ºC el 7 de junio).
El verano climatológico también ha sido normal en buena parte del Campo de Gibraltar y de la mitad oriental de la provincia. En la estación automática de Tarifa se ha registrado una anomalía térmica de +0,1 ºC con respecto al promedio climático 1981-2010 y ha sido ligeramente más fresco que el año pasado. En poblaciones como Los Barrios o Jimena de la Frontera, la temperatura media estacional ha quedado dentro del rango normal y ha sido algunas décimas más cálida que la de 2018. Los veranos de 2012, 2003, 2009 y 2015 siguen siendo los más cálidos de los últimos 20 años, mientras que el verano climatológico de 2013 se mantiene como el más fresco de ese período. Agosto ha sido el mes más cálido de la estación en la comarca campogibraltareña y destaca el episodio de fuerte calor de la segunda semana. Los vientos cálidos y secos de dirección noroeste contribuyeron a que las temperaturas se elevaran hasta valores próximos a los 40 ºC en localidades como Jimena de la Frontera, San Roque o Los Barrios. Junio fue el mes más fresco y las mínimas absolutas del verano se registraron entre los días 3 y 17.
Precipitaciones y otros meteoros
En general, el verano ha sido seco o muy seco en la provincia. Las precipitaciones han sido escasas y se han concentrado principalmente en torno a los primeros días del mes de junio. En la sierra no se han producido las habituales tormentas estivales, que contribuyen a reducir el déficit pluviométrico durante el estío. Esta situación ha contribuido al incremento del déficit de lluvias y ha agravado la sequía meteorológica que afecta a la mayor parte del territorio. En la Tabla 2 se muestra un resumen con las cantidades recogidas en algunos puntos a lo largo del período de estudio.
Pedro Posada contabilizó tan solo 0,2 mm en el pluviómetro del ayuntamiento de Grazalema. Se ha tratado de un verano muy seco, con un acumulado muy inferior a la media del período de referencia 1981-2010 y un día de precipitación apreciable (27 de julio). Ha sido el verano más seco desde 2012 en la localidad serrana.
Precipitaciones y otros meteoros
En general, el verano ha sido seco o muy seco en la provincia. Las precipitaciones han sido escasas y se han concentrado principalmente en torno a los primeros días del mes de junio. En la sierra no se han producido las habituales tormentas estivales, que contribuyen a reducir el déficit pluviométrico durante el estío. Esta situación ha contribuido al incremento del déficit de lluvias y ha agravado la sequía meteorológica que afecta a la mayor parte del territorio. En la Tabla 2 se muestra un resumen con las cantidades recogidas en algunos puntos a lo largo del período de estudio.
Pedro Posada contabilizó tan solo 0,2 mm en el pluviómetro del ayuntamiento de Grazalema. Se ha tratado de un verano muy seco, con un acumulado muy inferior a la media del período de referencia 1981-2010 y un día de precipitación apreciable (27 de julio). Ha sido el verano más seco desde 2012 en la localidad serrana.
Cortinas de precipitación en el entorno de Grazalema durante la tarde del día 27 de julio. Foto de Diego Tornay. |
Viento
El verano climatológico se ha caracterizado por el predominio de los vientos de poniente en la mayor parte de la provincia y por la ausencia de grandes temporales de levante. En la Figura 4 se puede observar que el viento fue predominantemente débil en la zona sur de la bahía de Cádiz, siendo algo más ventoso el mes junio. El levante hizo acto de presencia fundamentalmente en agosto, que también fue el mes con más calmas. La racha máxima de viento en el observatorio de Cádiz se produjo el 1 de junio (69,1 km/h) y a lo largo del trimestre se registraron 7 días con rachas iguales o superiores a 55 km/h, dos menos que el año pasado. Este valor queda claramente por debajo del normal (13,5 días).
En el observatorio de Tarifa, la racha máxima del verano se registró el 1 de julio y el 22 de agosto (78,1 km/h) y se contabilizaron un total de 21 días con rachas iguales o superiores a 55 km/h. En esta zona de la provincia el poniente también fue el viento predominante, mientras que el levante estuvo más presente durante el mes de agosto.
El verano climatológico se ha caracterizado por el predominio de los vientos de poniente en la mayor parte de la provincia y por la ausencia de grandes temporales de levante. En la Figura 4 se puede observar que el viento fue predominantemente débil en la zona sur de la bahía de Cádiz, siendo algo más ventoso el mes junio. El levante hizo acto de presencia fundamentalmente en agosto, que también fue el mes con más calmas. La racha máxima de viento en el observatorio de Cádiz se produjo el 1 de junio (69,1 km/h) y a lo largo del trimestre se registraron 7 días con rachas iguales o superiores a 55 km/h, dos menos que el año pasado. Este valor queda claramente por debajo del normal (13,5 días).
En el observatorio de Tarifa, la racha máxima del verano se registró el 1 de julio y el 22 de agosto (78,1 km/h) y se contabilizaron un total de 21 días con rachas iguales o superiores a 55 km/h. En esta zona de la provincia el poniente también fue el viento predominante, mientras que el levante estuvo más presente durante el mes de agosto.
Figura 4. Rosas de frecuencia y velocidad media del viento mensuales en una estación situada en Camposoto (San Fernando), en el sur de la bahía de Cádiz. El anemómetro se encuentra instalado a 5 metros sobre el suelo, en un lugar libre de obstáculos. Los datos de viento facilitados por Enrique Carrazoni para hacer estas gráficas son promedios horarios. Haz clic para ampliar la figura. [Los resúmenes climáticos de este blog no tienen carácter oficial y están basados en datos que AEMET pone a disposición de los usuarios de forma libre y gratuita. Para obtener información climatológica validada debéis poneros en contacto con la Agencia Estatal de Meteorología] |